domingo, 11 de febrero de 2018

Ley natural en Boyera resguardo de Cumbal parte 6

Memoria Histórica de Boyera 6


Esta entrada es la sexta publicación de los blogs sobre el derecho mayor.

Gilberto Valenzuela, exregidor de la vereda Cuaical: muy buenas tardes honorable corporación del cabildo, de aquí de nuestro territorio del resguardo del gran Cumbal, buenas tardes comunidad (…). 
Como llevar este pueblo, desde aquí, pues, este centro educativo, la chacla, el bejuco, el mantaquero, el chelpud, nos reunimos ahí en Cuaspud Chiquito, que Gilberto Peregüeza no me deja mentir, por ahí bajamos la vereda Cuaical, parte de la vereda Tasmag, parte de la vereda Quilismal, la vereda Nazate Cuetial y por Cuaspud, entramos con la vereda Cuaspud, los otros compañeros entraron de la vereda Guan, Tasmag, y Quilismal el Plan, por allá por la gruta, por tras la gruta, a las 5:00 de la mañana estuvimos ya empezando a templar el cordel (soga delgada entre 100 a 500 m de longitud), a las 6:00 (am) ya estuvieron los enemigos del pueblo, ya salió un grupo como de unas 200 personas, con machetes, con palos, con carabinas, entonces, un poquito la gente se retiró, la gente retrocedió, pero luego, valoro ese valor que tiene la mujer, había unas señoras, de sus follados y en sus follados empezaron a recoger piedra, y pase a los hombres para que no echen para atrás, sino, vamos para delante, y así fue, a punte de piedra, los sacamos a ese grupo que comenzó a atacar a esa hora, y hubo, artos ataques ese día, yo estaba con Valentín Cuaical, ahí donde es el estadio donde era de don Leonardo Alpala, de ahí, mirando todo, como venían, como hacían, entonces, a las 11:00 de la mañana llegó el coronel de la policía nacional de Pasto, con 300 unidades de agentes de policía.
Nosotros estábamos escribiendo lo que es la historia, como, como ha sido, como va saliendo, luego de eso, la gente quería todo mundo acercarse donde estaba el coronel, esa historia es triste, ahí tocaba amanecer, a veces los guaguas (niños) sin comer, e hicimos nuestro rancho, nos daban echando gasolina, mientras la policía corría por un lado, el ejército por otro lado, pero la gente resistimos, unos por el lado de Chautalá, otros por el lado de acá de Cuaspud, otros por la entrada del Pueblo Viejo, y otros por el lado de donde las Garcías, por el lado de Carlosama (municipio vecino), mientras nos sacaban por allá, la gente ya entraba por acá por el río, y así, hasta que se mamaron (cansaron), ejército, y policía y ahí estamos la comunidad, ahora ya es una vereda, Llano de Piedras, entonces, eso fue la lucha en 1975.


1978 esta persona quien les habla, fui primer año, llegue a ser vicepresidente del cabildo, las veredas, las seis que acabé de nombrar (Guan, Tasmag, Cuaical, Quilismal, Nazate Cuetial y Cuaspud), no tenían el documento de allá del Llano de Piedras, entonces la gente, desconocíamos, que talvez nos va a quitar el pueblo (mestizos), pero bueno, un mundo de cosas, pero con taita Hilarión fuimos compañeros, él fue presidente del cabildo yo fui vicepresidente, los dos fuimos los dos a Bogotá, en ese tiempo, no había transferencia ($), con nuestra platica, vendiendo el torito o la vaquita, logramos a irnos a Bogotá, en el mes de junio, me acuerdo ya, a fines de julio el mes de 1978, estuvimos con Hilarión Alpala en Bogotá, allá había el ministerio del gobierno, el señor Julián Narváez, del municipio de Potosí, y ese tipo nos reconoció, nos tomamos un aguardientico que llevamos de Nariño, y un paquetico de cigarrillos Malboro del Ecuador, entonces, nos pusimos a conversar, llegamos las 2:00 de la tarde a Bogotá, salimos de allá, a las 6:00 de la tarde del mismo día, con un macrodiagrama (mapa) que él le mandó al señor alcalde, finado José Antonio Arcos, diciéndole que, si no aprueban las actas que subió a las oficinas de la alcaldía de aquí de Cumbal, serán, expropiados de las 35 hectáreas que se dejó, todo eso lo que ahora es el estadio, entonces, ahí fue donde el exalcalde José Antonio Arcos, que en paz descanse, tuvo que firmar, y a los 15 días, por ahí, ya nuestra autoridad el cabildo, que fuimos nosotros, dimos la posesión, real, formal y material, a todos nuestros indios, nuestras indias, chinos, chinas y ahí están, ahí está la vereda y de ahí se siguió más recuperación, ya creyó toda nuestra gente se dio la unificación, entonces, taita Hilarión que en paz descanse, decía, “a nosotros nos dicen indios brujos, por no decirnos indios brutos” y ahí fue en donde la unificación para recuperar después aquí, perdón el Laurel.


Vino la recuperación del Laurel ya en 1978 que fui regidor, saque la fotocopia de la escritura 228 de 1758, y aquí no me han de dejar mentir, aquí está taita Elí, él con Efrén Tarapues llegaron a mi casa a pedir la escritura con mucha estrategia, porque los papeles allá estaban en privados, antes los exgobernadores no prestaban, o no leían, pero con esa escritura y con ese título y con esa fotocopia que me pedía mi compañero Elí y Efrén Tarapues, fue la pelea allá del Laurel, y ganamos el Laurel, fue la pelea de la finca la Palma en Chiles, también ganábamos a Chiles, de ahí, ganamos está finca, que aquí son 198 hectáreas, por dos hectáreas no son 200, y aquí dejamos un centro de capacitación, para que nuestros hijos, nuestras niñas, se capaciten, era con el fin de que aprendan las artesanías, a tejer, aprendan a cocer, aquí están 95 frazadas quedaron 85 colchonetas, quedaron ollas para cocinar, platos, cucharas, peroles, una cosa grande, que eso habíamos dejado el cabildo de 1985, esta persona, quien les habla, aquí está mi compañero Manuel Jesús, Alonso Valenzuela siendo gobernador y mi mayor Manuel Jesús fue, tesorero, de la corporación del cabildo, donde recogíamos de $500, y entregábamos al señor tesorero, para irnos a tomar una taza de café, a Pasto, al INCORA, y así, sucesivamente, y aquí quedaron las 198 Has, repartidas, por ingenieros a las 6 veredas en iguales partes.


Seguidamente, 1987 la comunidad nos volvió a reelegir, a esta persona, quien les habla, y a don Alonso Valenzuela, Manuel Jesús, no estuvo en el 87, recuperamos la Victoria, son 47 hectáreas, de ahí, dijimos no a los políticos, los politiqueros, lo que hacen los mestizos, venían con un ruedito de Norteño, y porque les conviene, por decirlo hoy, al “doctor” Leonidas, y nos repartían, y con eso la gente, vamos a dar el voto.


Entonces dijimos, porque no pensamos en un acueducto grande, interveredal, o el gran Cumbal, le pusimos cuando eso, después, en otras cosas, ya pasaron los ingenieros, haga vía, y hay, hasta ahora, ese acueducto era trazado para 3 municipios, después ya se hiso intermunicipal, ya no era interveredal, o el gran Cumbal; pero así como también, nuestros compañeros indígenas de Carlosama y los compañeros indígenas amigos de Guachucal, nos habían hecho unas trampas a los cabildos de aquí de Cumbal, entonces, hubo fuerza y el gobierno nacional, le puso frente, 3 cabildos, 3 alcaldes, entonces, cierto, había material, salió ese líquido de vital importancia, a los 20 años, yo, le dije aquí, a don Eduardo Ramos, le dije, hágame probar el agua de allá de la Puliza, y de verdad, con fuerza, brotó, aquí encimita, aquí donde el vecino, entonces, ese fue las tareas que hicimos el cabildo de 1987, y gracias (…), recuperamos el territorio, tenemos aquí este colegio que para la educación de nuestros hijos, de nuestros nietos, y tenemos el agua que es la vida.


En 1987 se recuperó la Victoria, ya lo dije y el acueducto, en 1989, siendo regidor también esta persona, recuperamos la finca del doctor Nelson Araujo, también 47 hectáreas, y repartirlas a todas 6 veredas, en iguales partes, ahí habían unas casitas, también quedaron para beneficio de la comunidad, ninguno de los regidores, o gobernador se ha cogido esos soberados sino para beneficio de la comunidad, esas han sido las tareas en 1988, salió nombrado por la comunidad gobernador aquí, el señor Manuel Jesús Tarapues, y esta persona quien les habla, él me dijo, Gilberto ayúdeme, y a usted, lo delego para que me acompañe en mi gobernabilidad con mucho gusto, tuvimos el orgullo de estar también, así como se dice, en mesa plancha, de aquí que son 973 hectáreas o algo así, recuperamos con don Manuel Jesús, y ahí tuvimos la dignidad de haber acompañado cuando el indígena también puede, ayudar a alguna persona que, le hace el favor, también hay que ayudarle.
Alonso Valenzuela en 1985, invitó a los compañeros de otros resguardos, a los señores gobernadores, y nos reunimos 19 gobernadores, aquí en esta parte, en donde estamos, en Boyera, y siendo él gobernador, dijo reclamemos al capitán Orlando Loaiza Betancourt, y los compañeros gobernadores, del Encano, me acuerdo que vinieron, creo que unos de más lejos, en compañía de nuestro señor gobernador, y firmaron un memorial, diciendo que lo tuviera el general de la tercera brigada, aquí en la ciudad de Ipiales, entonces, cuando él (general) vino a hacernos una visita, dijo, “como así Alonso”, dijo, “yo vengo a agradecerte”, dijo, “Alonso, Gilberto, por esas palabras que ustedes me solicitaron, mi general de la tercera brigada en Cali”, dijo, “algún día yo tengo que acordarme de ustedes”, y ahí fuimos con Manuel Jesús, porque él asumió de capitán, fue, mayor de la policía, y entonces, ese acuerdo, esas cosas que hemos hecho, gracias a él, aquí está Manuel Jesús no me deja mentir, a las 11:00 de la noche estábamos hablando en Ipiales y aquí vivimos, como dice alguien, vivito y coleando estamos, en esta tarde con ustedes, dando a conocer, lo que ha sido, en Boyera, aquí en esta parte, en 1874, hubo un tipo torturado por la policía, con la fuerza pública, lo encarcelaron, por eso le damos mucha piedra a uno, y ahí fue lo de 1985, me nombraron a mí de presidente del cabildo, y con él nos entramos y ganamos, aquí este territorio que estamos, entonces, esas han sido las luchas, los sufrimientos, entonces, yo pregunto a los jóvenes, a los radio oyentes que nos están escuchando por radio, a los candidatos que están a la gobernabilidad de mi vereda Cuaical, decirles, que tengan mano fuerte, para defender la restitución del resguardo del gran Cumbal, porque todavía tenemos tierra, para dejar a nuestra comunidad indígena, y se necesita, y no solamente eso, tenemos que hacer más cosas, como hacer proyectos para beneficio de las familias indígenas, del resguardo del gran Cumbal. Muchas gracias señores oyentes, por haberme dado este momento, estas palabras, muchas gracias.




Muchos pai, pai, por leer.